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Foto del escritorMané Yañez

¿ES TU SUEÑO?


Con mucha frecuencia escuchamos indistintamente las palabras: sueño, metas, objetivos, etc. sin entrar a definiciones de diccionario ni nada que se le parezca, yo decidí darles esta definición para este ejemplo:

Sueño: Algo que deseo, me emociona tan solo pensarlo, me llena de energía. Es algo grande, algo que hasta el día de hoy no he conseguido y que siento que por lograrlo vale la pena cualquier esfuerzo. Está en mi corazón y en mi mente, es mi conexión con la inteligencia infinita.

Meta: Es una misión cumplida, algo que sabía que tenía que lograr y al final lo he hecho. Un lugar al cual quería llegar, una serie de Objetivos alcanzados me permiten lograr mi Meta y una serie de Metas logradas permite alcanzar mi Sueño.

Objetivo: Son señalizaciones que me indican que voy por el camino adecuado para lograr mi meta y, posteriormente mi sueño. Los objetivos componen las Metas. Los objetivos son planificaciones y acciones que realizo para lograr resultados. Objetivo = Resultados.

Esto no deja de ser una cuestión de lenguaje que cada quien adapta a como se siente más cómodo al hablar. Lo que si tiene importancia es que definas exactamente que quieres y hacia dónde vas. ¡Eso si es determinante! Con frecuencia escucho a jugadores jóvenes decir que quieren llegar al primer nivel y participar en las competiciones más prestigiosas del mundo futbolístico, pero después sus acciones les delatan. Me explico: Platicando me dicen que quieren lograr algo, pero después se ausentan uno o dos días de los entrenamientos. Platicando me dicen que quieren llegar a lo más alto, pero cuando entrenan no lo hacen con la exigencia ni la seriedad que su sueño requiere.

Es justo ahí cuando me pregunto y les pregunto: ¿De verdad es tu sueño? Y si así fuera ¿No tienes 3 horas diarias para dedicarle a ese sueño que tanto dices querer?

La conclusión para mí es sencilla: ¡En realidad no deseas alcanzar ese sueño! Dices que quieres eso, pero la realidad es que prefieres otras actividades, seguramente más cómodas y reconfortantes que trabajar por aquello que a largo plazo dices soñar.

¿Cuál es tu sueño?

¿Es una salud increíble, pero tomas, fumas, no haces ejercicio y/o te alimentas mal? ¿Es una posición económica próspera, pero no investigas, estudias, vendes ni trabajas más de lo que marca tu horario laboral? ¿Quieres tener relaciones prósperas y amorosas, pero siempre estás de malas o cansado para convivir con tus seres queridos?

No te engañes, si no haces tiempo para dedicarle a tu sueño, entonces: NO ES TU SUEÑO, ¡dite la verdad!

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